El éxito en desarrollo y ejecución de un proyecto, requiere, además de las tareas puramente técnicas, realizar un adecuada gestión desde su inicio hasta la puesta en marcha.
Esta labor de gestión tiene como funciones principales la coordinación de los intervinientes, el control económico y el seguimiento de la planificación. Todo ello, para garantizar que se respetan los objetivos de calidad, plazos y costes del proyecto.
El Director de Proyecto aglutina estas labores de gestión, pudiendo incluir tareas adicionales como gestión de compras, relaciones con administraciones públicas….